Hansa Mehta
Un día como hoy pero de 1995 se despedía Hansa Jivraj Mehta, filósofa, educadora, trabajadora social, escritora, política y feminista india que luchó por la igualdad de derechos de las mujeres en el mundo y fue una de las impulsoras del lenguaje inclusivo en la Declaración Universal de los Derechos Humanos aprobada por la ONU en 1948. Es considerada la artífice del cambio en su Artículo 1 que expresaba: “Todos los hombres nacen libres e iguales” y fue revalorizada por la frase: “Todos los seres humanos nacen libres e iguales”.
Cambio de palabras que hoy puede parecer menor pero que llevó varias semanas de negociaciones para su concreción porque en la mitad del siglo XX la mujer seguía sin ser considerada con la misma entidad y derechos que los hombres.
Nació en 1897 en Surat, actual estado de Guyarat, en el seno de una familia de la subcasta de brahmanes hindúes Nagar Brahmin. Su padre, Manubhai Mehta, fue primer ministro de Baroda. Cursó sus estudios primarios y secundarios en la ciudad de Baroda (hoy Vadodara). Posteriormente, se trasladó a Mumbai donde se graduó en Filosofía.
Al finalizar sus estudios, se embarcó a Inglaterra. En Londres estudió periodismo y sociología. Se recibió en 1918. Allí se puso en contacto con el mundo independentista indio. Conoció a Amrit Kaur y a Sarojini Naidu, mujeres relevantes en el movimiento por la independencia y de la lucha por los derechos de las mujeres. Viajó a EE UU, donde conoció al movimiento sufragista y su gesta y luego visitó Japón.
De regreso a India conoció a Mahatma Gandhi en Ahmedabad, ciudad desde donde partió la marcha que consolidó la rebelión contra el imperio británico y Hansa Mehta profundizó su participación en el movimiento nacionalista. Se casó con el médico personal de Gandhi y escritor Jivraj Narayan Mehta lo que provocó un escándalo de proporciones debido a que pertenecían a castas diferentes. Se produjeron manifestaciones públicas contrarias al casamiento pero su padre bancó la parada y el reformador de Baroda también. Fue un matrimonio Patriloma (contra la corriente) que superó las presiones y prejuicios.
En 1926 fue elegida para integrar el Comité de Escuelas de Mumbai y en 1932 asumió la presidencia del movimiento “Bhagini Samaj” (una organización para la defensa de los derechos y el bienestar de la mujer).
Desempeñó un papel central contra la llamada “Comisión Simon” que fue una herramienta política y jurídica utilizada por los británicos para generar una reforma constitucional de su principal colonia pero que consolidó el dominio ejercido y no modificó el status quo imperante. Durante esa lucha incesante Hansa fue encarcelada en 1930 y 1932, en esta última oportunidad junto a su marido.
En 1937 ganó las elecciones provinciales y fue electa miembro del Consejo Legislativo de Mumbai. Fue la primera mujer miembro de dicho Consejo y fue designada Secretaria Parlamentaria del Ministro de Educación y Salud.
Entre 1946 y 1947 presidió la Conferencia de Mujeres de toda la India, una organización creada para defender el derecho a la educación de las mujeres y niñas que luego amplió su espectro de actuación. Desde allí propuso la influente “Carta de los Derechos de las Mujeres”.
En 1946 fue una de las representantes de Mumbai en la Asamblea Constituyente que se conformó para redactar una nueva Constitución. Solo hubo quince mujeres entre los congresistas electos por las Asambleas provinciales. Hansa Mehta jugó un papel crucial para introducir algunos artículos sobre los derechos de las mujeres que vivían relegadas social, económica y políticamente.
Fue miembro del Comité Asesor, del Subcomité de Derechos Fundamentales y del Comité de Constitución Provincial, logró que se aprobara la Ley Sarda que abolió el matrimonio infantil e integró el Comité de Redacción del Proyecto de Ley del Código Hindú.
Durante las discusiones que duraron casi tres años, Hansa y 72 mujeres presentaron la primera bandera de India independiente ante la Asamblea.
Entre 1947 y 1948 fue la representante india en el subcomité sobre el estado de las mujeres y fue delegada en la Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas. Las sesiones duraron dos años y hubo cuatro mujeres decisivas para que Declaración Universal de los Derechos Humanos estuviera impregnada por el principio de igualdad entre hombres y mujeres: Eleanor Roosevelt, quien la presidió, Minerva Bernardino de la República Dominicana, Shaista Ikramullah de Pakistán y Hansa Mehta de la República de India.
Posteriormente, ocupó el cargo de vicepresidenta de la Comisión de Derechos Humanos de Naciones Unidas y en 1958 fue miembro del Comité ejecutivo de la UNESCO. En su país también ocupó diversos cargos: vicerrectora de la SNDT Women’s University, miembro de la Junta de Educación Secundaria de toda la India, presidenta de la Junta Interuniversitaria de la India y vicecanciller de la Universidad Maharaja Sayajirao de Baroda.
Al mismo tiempo, despuntó otro vicio: la literatura. Fue pionera en la publicación de libros en idioma gujaratí, tanto de la problemática del mundo femenino, como clásicos u obras infantiles.
Tradujo Hamlet y El mercader de Venecia de Shakespeare, El burgués gentilhombrre y Tartufo de Molière, Los viajes de Gulliver de Jonathan Swift, Las aventuras del rey Vikrama y el príncipe de Ayodhya y Ramayana, texto épico del siglo III a.C escrito en sánscrito atribuido a Valmiki. También publicó libros sobre la condición de las mujeres bajo la ley hindú de matrimonio y la sucesión, sobre la posguerra y la reconstrucción educativa y las libertades civiles, entre otros textos.
En la primavera de 1995 su trajín incansable y sus ansias de conocimiento permanente se detuvieron en la ciudad de Mumbai.
Salú Hansa Mehta! Por tu perseverancia y por tu habilidad e inteligencia para manejarte en un mundo dominado por los hombres y lograr tanto definiciones globales sobre la igualdad de géneros como políticas concretas en tu país-continente natal.
Ruben Ruiz
Secretario General