Cosme Argerich
Un día como hoy pero de 1758 nació Cosme Mariano Argerich, médico en cuyo honor recibieron su nombre dos hospitales en la ciudad de Buenos Aires: El Hospital General de Agudos, en el barrio de La Boca y el Hospital Militar Central, en el barrio de Belgrano.
Hijo del cirujano militar Francisco Argerich Batallas y de María Josefa del Castillo Burgués. Tuvo 17 hermanos. En 1776 fue enviado a España. Estudió en la Real Pontificia Universidad de Cervera (Barcelona) donde en 1783, recibió el título de Doctor en Medicina del Gremio y Claustro y en la que trabajó como ayudante rentado en las cátedras de física y química. En esas tierras se casó con Margarita Martí -con quien tuvo a su primer hijo en 1786- y ejerció la medicina en forma intensa por lo que cosechó gran prestigio.
En 1794 regresó a Buenos Aires y fue nombrado Primer Examinador del Protomedicato, institución oficial que nucleaba a los médicos de la ciudad. En 1795, trabajó en el Colegio de Huérfanos y en el Hospital de Mujeres. Entre 1794 y 1796 tuvo una gran participación en la lucha contra los brotes de viruela y en esos años -junto a Agustín Fabre y Bernardo Nogués- redactó las “Ordenanzas del Real Colegio de Medicina y Cirugía de Buenos Aires”.
En 1801 fue nombrado profesor del Primer Curso de la Carrera de Medicina y escribe un artículo en el periódico Telégrafo Mercantil recomendando recurrir a la vacunación antivariólica, hecho poco común en la época por el miedo y el rechazo imperante sobre el tema. El 1º de marzo de 1802 comenzó el dictado de clases en la Escuela de Medicina con 14 alumnos en la que Argerich fue profesor de Física, Química y Botánica y el cirujano Agustín Fabre, considerado el primer obstetra de la ciudad, dictaba clases de Anatomía, Clínica Quirúrgica y Partos. Simultáneamente es designado como Protomédico General y alcalde Mayor de todas la Facultades de Medicina, Cirugía, Pharmacia y Phlebotomía.
En 1805 introdujo las primeras vacunas contra la viruela de una manera subrepticia. Fue traída por tres niños huérfanos (otros hablan de una esclava) cuyos brazos fueron infectaron con las pústulas que contenían el “líquido milagroso” y que se traspasaron durante su viaje en el barco esclavista portugués “Rosa del Río”. El 30 de agosto de ese año Argerich y el sacerdote Saturnino Segurola comenzaron a vacunar a todos los ciudadanos que lo requirieron.
Durante las invasiones inglesas tuvo un papel destacado en el cuidado de los heridos. Integró el Regimiento de Húsares y por su labor en el combate fue nombrado cirujano del 2ª Regimiento y jefe Médico del Hospital de la Caridad donde, junto a 17 médicos recién graduados, profesores y estudiantes, atendió a los heridos de ambos bandos. En esa época se incorporó a la masonería.
Participó de la Revolución de Mayo. Según algunos historiadores, en el Cabildo Abierto del 22 de mayo de 1810 se impuso su postura de separar del cargo al virrey Cisneros. En esa sesión tres médicos apoyaron su postura: Agustín Fabre, Bernardo Nogués y Justo García Valdés. El 25 de mayo también participó de las deliberaciones y reafirmó la decisión tener un gobierno propio.
En 1811 la Primera Junta lo nombró Conjuez del Tribunal del Protomedicato, un puesto estratégico que supervisaba las pruebas de los aspirantes, influía sobre el plan curricular de estudios, decidía sobre conflictos en las especialidades, fiscalizaba las importaciones.
En febrero de 1813 fue despachado solo con un botiquín para asistir al Regimiento de Granaderos en el combate de San Lorenzo. Intervino a varios heridos y operó al capitán Justo Bermúdez que falleció 11 días después. En marzo de 1813, la Asamblea nombró a Cosme Argerich catedrático para elaborar un plan de estudios para una facultad de medicina y cirugía.
El Plan -aprobado por la Asamblea- constaba de 6 años con una gran coordinación de materias y alcance de estudios. Anatomía Normal y Patológica, la Fisiología, Patología General, Higiene, Semiología, Terapéutica y Materia Médica, estaban distribuidas en los 4 primeros años de estudio; los 2 últimos estaban destinados a la enseñanza de la Nosografía Quirúrgica y Médica.
Los alumnos de 5° y 6° año tenían la obligación de asistir diariamente a las visitas hospitalarias de los profesores y escuchar las conferencias de clínica. Había que tener el título de bachiller y conocimientos rudimentarios de medicina. No obstante, la necesidad imperiosa de cirujanos para cubrir las necesidades de los ejércitos patriotas revirtió la idea original de una Facultad de Medicina y Cirugía en Instituto Médico Militar.
En diciembre de ese año, fue designado cirujano del Ejército Auxiliar del Alto Perú; asistió a los heridos en las batallas de Tucumán y Salta y en los combates de Puesto del Marqués y Venta y Media, pero retornó a Buenos Aires con problemas de salud. En septiembre de 1816 fue designado, junto al cirujano mayor Diego Paroissien, para organizar el departamento de Hospitales del Ejército. Lo constituyeron con 3 profesores, 5 sacerdotes betlemitas y 7 civiles asistentes de cirujanos del Instituto Médico Militar. Esa organización permitió al Ejército de los Andes tener insumos médicos y sanitarios para su campaña libertadora y logró conformar un verdadero banco de sangre que fue de gran utilidad durante el cruce de la cordillera.
Pero no todo fueron batallas, hospitales y reglamentos. Luego de enviudar de su primera esposa, contrajo matrimonio en segundas nupcias con Juana López Camelo Cheves, y al fallecer se casó por tercera vez con Juana Chávez. Tuvo cinco hijos con su primera esposa (Francisco Cosme, Juan Antonio, Petrona Josefa, Luis José y Josefa) y 11 con la segunda (Ramón, Gregoria, Ana María, Manuel José, Manuela, Ignacia, Dolores, Mercedes, Justo, Benito y Petrona Ignacia). Notable…
Salú Cosme! Por tu compromiso con la salud y con la Patria en los momentos en que había que comprometerse y cuidar la vida de los demás.
Ruben Ruiz
Secretario General